Tras el difícil episodio que vivió al ser acusada de robo en los Estados Unidos, Daniela Castro se presentó ante la prensa mexicana para defender su integridad y fustigó cómo resultó implicada en este hecho que puso en duda su reputación.
La actriz apareció acompañada de sus abogados y entre lágrimas confesó que lo que más la lastimó en todo este proceso fue el “daño terrible que sufrió su familia”, así como las consecuencias emocionales que la golpearon desde el primer instante.
Empero, confirmó que no se quedará de brazos cruzados, pues tomará acciones legales en contra de la tienda y del empleado involucrado en este asunto.
“HE SIDO JUZGADA, CRUCIFICADA”
“Quiero compartirles que he vivido la experiencia más difícil de mi vida. He sido juzgada, crucificada, señalada, derrotada, humillada por algunos medios, por otros no. A todos los que me crucificaron y a todos los que me dieron el voto de confianza les agradezco”, dijo entre lágrimas.
Enseguida defendió su integridad. “Yo soy inocente y se cometió una injusticia. Yo soy madre de familia, tengo 32 años trabajando, tengo una carrera que a muchos de ustedes les consta que es impecable”, afirmó.
Daniel Castro fue contundente: “Mi defensa salió inocente sin probable causa de arresto. También les quiero aclarar que no soy cleptómana, no estoy enferma de nada, que esto me afectó emocionalmente mucho más de lo que ustedes se pueden imaginar”, puntualizó.